Santo Domingo.- El Fondo Especial para el Desarrollo Agropecuario (FEDA) y la Oficina Nacional de Apoyo a la Reforma Penitenciaria (Onaprep) ponen en marcha, mediante acuerdo interinstitucional, el programa “Sembrando en Libertad”, iniciativa que busca transformar la realidad y la vida de parte de los 26,000 privados de libertad que enfrenta el sistema penitenciario nacional. La alianza fue firmada por el director ejecutivo del FEDA, Hecmilio Galván, y el director de Onaprep, Roberto Santana.
El acto se llevó a cabo en el Centro de Corrección y Rehabilitación de las Parras, en Guerra, y sirvió de lanzamiento del programa Sembrando en Libertad, el cual dotará a los internos de herramientas y conocimientos esenciales en producción agropecuaria, promoviendo el cultivo de hortalizas, vegetales, coco, cacao, carne de conejo, pollos y tilapias, etc., para el autoconsumo dentro de los recintos y la comercialización. La acción proporciona, además, una valiosa oportunidad de aprendizaje que les permitirá, al recuperar su libertad, reintegrarse a la sociedad con habilidades técnicas y la posibilidades económicas de emprender su propio negocio en el sector agropecuario.

Hecmilio Galvan aseguró que, con el programa, se pretende, además de capacitar, lograr la instalación de granjas y parcelas modelos como terapia ocupacional, y sobre todo, para donar un pequeño capital de semilla que permita que los privados de libertad, una vez liberados, tengan una fuente de ingreso productivo para garantizar una inserción social correcta.
Roberto Santana, además de agradecer al FEDA, puso a disposición los espacios vacíos dentro de los recintos penitenciarios para convertirlos en áreas productivas, sirviendo como modelo de autosuficiencia alimentaria en los centros correccionales. También, los privados de libertad recibirán capacitación en prácticas agropecuarias, desarrollando habilidades técnicas que les serán útiles al reintegrarse a la sociedad.
La meta del programa es establecer, en una primera etapa, 19 unidades productivas de hortalizas y vegetales en centros penitenciarios; disminuir el gasto en compra de alimentos procesados en los centros penitenciarios beneficiados, habilitar; utilizar, al menos, el 70 % de los espacios disponibles en los centros penitenciarios seleccionados y capacitar a un mínimo de 5,000 internos en técnicas agropecuarias.
Fuente: Presidencia