Un fiscal especial que sostuvo una relación sentimental con la fiscal de distrito del condado Fulton, Fani Willis, se retiró formalmente el viernes del caso de interferencia electoral de Georgia contra Donald Trump después de que un juez dictaminara que tenía que irse o Willis no podría proseguir con los cargos.
La renuncia del fiscal Nathan Wade permite a Willis permanecer en el más extenso de los cuatro casos penales contra el virtual candidato republicano en las elecciones presidenciales de 2024.
Pero el daño a largo plazo a la percepción del público sobre el enjuiciamiento sigue sin estar claro, sobre todo a la luz del incesante aluvión de ataques de Trump a la pareja que se comprometió a hacer que Trump rinda cuentas, pero encontró que sus propias acciones estaban bajo el microscopio de la opinión pública.
Wade presentó su dimisión en una carta a Willis, diciendo que lo hacía “en interés de la democracia, en compromiso con el público estadounidense y para que este caso avance lo más rápidamente posible”.
“Estoy seguro de que el caso, y el equipo, estarán en buenas manos de aquí en adelante y se hará justicia”, escribió Wade.
Willis elogió la “profesionalidad y dignidad” de Wade en una carta en la que aceptaba su dimisión, con efecto inmediato. Dijo que él había soportado amenazas contra sí mismo y su familia, así como “ataques injustificados” en los medios de comunicación y en los tribunales contra su reputación como abogado.
“Siempre recordaré —y se lo recordaré a todos— que fuiste lo suficientemente valiente como para dar un paso adelante y asumir la investigación y el enjuiciamiento de las acusaciones de que los demandados en este caso participaron en una conspiración para anular las elecciones presidenciales de Georgia en 2020”, escribió Willis.
El equipo de Trump no opinó lo mismo.
En una publicación en redes sociales, Trump dijo que el “amante de Fani Willis” había “dimitido en desgracia”, y el exmandatario repitió su afirmación de que el caso es un intento por perjudicar su campaña en pos de volver a la Casa Blanca en noviembre. Trump ha negado haber hecho nada malo y se ha declarado inocente.
Un abogado del expresidente dijo que respetaban la decisión del tribunal, pero creen que el juez “no le dio la importancia adecuada al comportamiento inapropiado de los fiscales Willis y Wade”.
“Utilizaremos todas las opciones jurídicas disponibles mientras seguimos luchando para poner fin a este caso, que nunca debería haber sido presentado en primer lugar”, dijo el abogado de Trump, Steve Sadow.