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La Habana.- Cuba registrará este jueves el mayor índice de afectación por apagones en lo que va de año con una tasa de déficit máxima de casi el 51 %, según las previsiones diarias de la empresa estatal Unión Eléctrica (UNE).

Con estas cifras, más de la mitad de los bombillos en todo el país estarán apagados a la fuerza en el horario pico, el momento de mayor demanda, durante la tarde-noche.

La UNE prevé para esta jornada una capacidad máxima de generación eléctrica de megavatios 1.692 (MW) para una demanda que alcanzará los 3.300 MW.

El déficit (la diferencia entre oferta y demanda) será de 1.608 MW y la afectación (lo que se desconecta realmente de forma preventiva) alcanzará los 1.678 MW en el denominado “horario pico” en la tarde-noche.

Los frecuentes apagones han desencadenado protestas antigubernamentales, incluidas las del 11 de julio de 2021 -las mayores en décadas-, y las del pasado 17 de marzo en Santiago de Cuba (este) y otras localidades.

La crisis que volvió a los apagones algo habitual en Cuba

El sistema eléctrico cubano se encuentra en una situación muy precaria por las frecuentes averías en las obsoletas centrales termoeléctricas, con más de cuatro décadas de explotación y déficit de inversiones. La falta de combustible importado -por la escasez de divisas- empeora la coyuntura.

Los frecuentes apagones afectan la economía cubana- que en 2023 se contrajo un 1,9 %- e impulsan el descontento social en una sociedad afectada por la crisis económica agravada en los últimos años.

Según los datos cotejados por EFE con base a los informes diarios de la UNE, el de este jueves es el máximo con cerca del 51 %, seguido por los índices registrados en febrero (45 %), marzo (44%), y los de estos últimos días que también han superado el 40 % de afectación.

La UNE, perteneciente al Ministerio de Energía y Minas, señala en sus reportes que la falta de combustible y las averías en las centrales termoeléctricas terrestres son las principales causas de los frecuentes y prolongados apagones en Cuba.

Actualmente, cuatro de las 20 unidades de producción energética en las siete centrales termoeléctricas terrestres del país están averiadas y tres siguen en mantenimiento, según la compañía.

Además, 50 centrales de generación distribuida (motores eléctricos) están fuera de servicio por falta de combustible (diesel y fueloil).