Un jurado de 12 personas quedó establecido el jueves para el histórico juicio al expresidente Donald Trump en Nueva York, con lo cual el proceso está más cerca de las declaraciones de apertura y de testimonios impactantes durante algunas semanas.
El tribunal rápidamente procedió a elegir a jurados suplentes.
Entre los miembros del jurado hay un profesional de ventas, un ingeniero de software, un ingeniero de seguridad, un profesor de inglés, un terapista del lenguaje, varios abogados, un banquero de inversiones y un administrador de valores retirado.
El primer juicio en la historia a un expresidente estadounidense se desarrollará mientras se llevan a cabo las campañas para la Casa Blanca, lo cual garantiza que los problemas jurídicos del virtual candidato republicano serán un asunto predominante en la contienda frente al presidente demócrata Joe Biden.
Es casi seguro que en el juicio haya testimonios desfavorables sobre la vida personal de Trump antes de que se convirtiera en mandatario, con acusaciones de que falsificó libros contables para suprimir ciertas historias sobre sus relaciones sexuales en los últimos días de la campaña electoral de 2016.
El expresidente ha dejado clara su determinación de utilizar en su favor su situación jurídica. Después de un día entero de selección del jurado, Trump se quejó con los reporteros de que debería de estar haciendo campaña, pero en lugar de eso estaba en la corte para lo que, según él, es un “juicio muy injusto”.
“Todo el mundo está indignado por ello”, afirmó. “Saben que el mundo entero está viendo esta farsa de Nueva York”.
El proceso de selección de los jurados pareció sufrir un revés horas antes cuando dos jurados fueron descartados, una de ellas después de que dijo dudar de su capacidad para ser imparcial luego de que se dieron a conocer detalles sobre su identidad, y el otro por preocupaciones de que algunas de sus respuestas ante la corte pudieran haber sido imprecisas.
Pero los abogados, que empezaron el día con sólo cinco jurados, eligieron a los restantes siete en rápida sucesión, junto con un suplente. El juez Juan Merchan ha dicho que su objetivo es tener seis suplentes.
El juicio gira en torno a un pago de 130.000 dólares que Michael Cohen —en ese entonces abogado de Trump— hizo poco antes de los comicios de 2016 a la actriz porno Stormy Daniels para evitar que sus alegatos de que sostuvo un encuentro sexual con Trump se dieran a conocer en los últimos días de la campaña electoral.
Los fiscales dicen que Trump ocultó la verdadera naturaleza de los pagos en los registros contables cuando su compañía le reembolsó a Cohen, que se declaró culpable de cargos federales en 2018 y se prevé que sea uno de los testigos más destacados de la fiscalía.
Trump ha negado haber sostenido relaciones sexuales con Daniels, y sus abogados argumentan que los pagos realizados a Cohen fueron gastos jurídicos legítimos.
El exmandatario enfrenta 34 cargos graves de falsificar registros contables. Si es declarado culpable podría ir cuatro años a la cárcel, aunque no está claro que el juez vaya a decidir ponerlo tras las rejas. Es casi seguro que Trump apelará cualquier declaración de culpabilidad.
En otros sucesos, los fiscales pidieron que Trump fuera declarado en desacato por una serie de publicaciones en redes sociales esta semana, y el juez les prohibió a los reporteros dar a conocer quiénes son los empleadores de los miembros del jurado luego de expresar que le preocupa su privacidad.
