Un tribunal de República Dominicana condenó a dos personas por corrupción ligada al conglomerado brasileño Odebrecht, que admitió haber pagado 92 millones de dólares en sobornos para ganar contratos de obras públicas en la nación caribeña.
En 2016, Odebrecht llegó a un acuerdo de culpabilidad con los fiscales federales de Estados Unidos en el que reconoció haber pagado sobornos en una docena de países como parte de un esfuerzo por convertirse en un actor dominante en el desarrollo de infraestructura en América Latina.
El tribunal de tres jueces condenó a última hora del jueves al exrepresentante comercial de Odebrecht, Ángel Rondón, a ocho años de prisión por cargos de soborno y lavado de dinero.
El exministro de Obras Públicas de la República Dominicana Víctor Díaz recibió cinco años por enriquecimiento ilícito y lavado de dinero.
Los jueces «decidieron entregar mi cabeza a los fiscales», dijo Rondón al salir del juzgado. Reuters no pudo obtener comentarios de Díaz.
Los dos permanecerán libres mientras apelan el caso.
El fiscal anticorrupción Wilson Camacho dijo a los periodistas que la sentencia ordenaba la incautación de empresas y cuentas bancarias en poder de Rondón y Díaz y les obligaba a entregar casas de lujo.
El tribunal absolvió a otras cuatro personas acusadas en el caso, diciendo que los fiscales no habían proporcionado pruebas suficientes para condenar.
Las autoridades dominicanas llegaron en 2017 a un acuerdo con Odebrecht en el que la empresa pagó una multa de 184 millones de dólares a cambio de brindar información sobre sus operaciones en el país.
El escándalo asociado con Odebrecht, que desde entonces cambió su nombre a Novonor, sacudió a los gobiernos de la región y obligó a la renuncia de un presidente peruano. El suicidio de un exjefe de Estado peruano también se ha relacionado con el escándalo.
