Eduardo Bolsonaro, hijo del presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, aseguró este martes tener los votos suficientes en el Senado para ser designado como nuevo embajador de Brasil en Estados Unidos, un asunto que ha desatado una enorme polémica en el país.
«Creo que si la votación fuera hoy, conseguiría la aprobación. Estoy confiado», afirmó el diputado federal en declaraciones recogidas por el diario O Globo.
Eduardo Bolsonaro comentó que «no ha contado los votos», pero que su «instinto» le dice que la valoración de la mayoría de los senadores, que tendrán en su mano su nombramiento como embajador en Washington, es «positiva», tras hablar con varios de ellos.
El parlamentario, de 35 años y quien se convirtió en las elecciones legislativas de octubre de 2018 en el diputado federal más votado, fue propuesto por su padre para ese cargo, lo que ha levantado las críticas de la oposición, que consideran el gesto como un acto de nepotismo.
Mientras, Estados Unidos dio su aval al nombramiento del hijo del mandatario tras concederle el plácet de estilo, según anunció la Cancillería brasileña en agosto pasado.
Sin embargo, el jefe de Estado brasileño aún no ha oficializado la candidatura de su hijo en el Senado a la espera de tener la «seguridad» de que la misma saldrá adelante.
Asesores y abogados de la Cámara Alta han enfrentado sus posiciones con respecto a este tema, pues los primeros consideran que la designación de Eduardo Bolsonaro como embajador en EE.UU. puede considerarse «nepotismo» y los segundos rechazan esa tesis.
En otra entrevista divulgada este martes en la televisión pública brasileña, Eduardo Bolsonaro, quien es además presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara Baja, afirmó que someterse al análisis del Senado será «una oportunidad increíble» para «mostrar que no solo es el hijo del presidente».
«Soy abogado, policía federal, tengo experiencia en el exterior», se defendió.
Eduardo Bolsonaro ha actuado como una suerte de canciller informal y el pasado mes de marzo acompañó al presidente brasileño en su primera visita oficial a Estados Unidos, donde participó en el encuentro que Bolsonaro mantuvo con su homólogo, Donald Trump, en la Casa Blanca.
La representación de Brasil en Washington se encuentra sin embajador desde el pasado abril, cuando el diplomático Sergio Amaral, en el puesto desde 2016, fue transferido para una oficina en Sao Paulo.
